[Retro]Batman V Superman: El Amanecer de la Justicia
Historias individuales que pertenecen a un mismo entorno ya sea en espacio o tiempo, los Universos Cinematográficos bien definidos pueden traer buenos frutos, Warner busco Zack Snyder para hacer con Superman lo que Christopher Nolan logró con Batman, y lo cumplió, por lo menos en parte. En un intento desesperado por emular una fórmula con el fin de traer beneficios de manera inmediata, el estudio le ordenó al director de El Hombre de Acero que olvidara el enfoque del personaje que le habían ofrecido desarrollar desde una perspectiva individual, y se enfocara en un panorama mas amplio, su siguiente propuesta necesitaria sentar las bases para una saga compartida que tenga su propio estilo y se diferencia de lo conocido. No solo estaría a cargo de su segundo proyecto, sino de unos cuantos, y en otros serviria de supervisor para que se de una verdadera sensación de cohesión.
¿Por qué me dedico en explicar esta pequeña parte del que no sabíamos seria un pasado tormentoso? Un buen director no tiene que ser precisamente un buen guionista, hay parajes de director y guionista que funcionan a la perfección y ofrecen productos inolvidables que quedan para la posteridad. Recapitulemos, una sola persona que además de encargarse de dirigir, es co-guionista de lo que está contando, y supervisor de que sea el primer vistazo a un entorno interconectada que nunca antes se había visto, por muy buenas intenciones que tenga, no puede ser capaz de tener tantas responsabilidades, existen casos en que este movimiento ha funcionado, pero hablando de este largometraje en específico, demostró que no todo se le debió encargar a una sola persona.
El director Zack Snyder junto al guionista Chris Terrio nos intentaron contar un relato del genero de superheroes como nunca antes se había hecho, desde el ojo de la cinematografía como un arte, mostrándonos a estos super seres con un carácter que recuerda las leyendas de las mitologías bebiendo desde su material de origen, y fallaron debido a que en un solo intento se dispusieron a establecer demasiadas metas que con más calma y con un proceso de compartimentación hubiese engendrado resultados incomparables. Lo que terminó sucediendo fue una división entre los espectadores convencionales, los conocedores de las viñetas, y los especialistas del cine, en un intento por entender lo que vieron, un experimento que a simple vista no les salió bien.
Henry Cavill regreso como Superman después de establecer a su personaje diferente en comparación con los que venían acostumbrados a los tan regias versiones interpretadas por Christopher Reeves y Brandon Routh. Uno de los puntos más criticados de la primera vez en que Cavill se presentó como el nuevo Hombre del Mañana, fue que lo humanizaron a tal punto que no se reconocía al personaje más icónico de los tebeos que fue llevado a tantos medios como fue posible por su carisma. La actitud que tiene en esta película no cambió mucho de lo visto anteriormente, si antes no estaba seguro de cuál era su lugar en este mundo como un extranjero, ahora se cuestiona si en realidad debió cargar en sus hombros el peso de una era moderna que duda desde lo más inocente para no repetir una tragedia, se siente consternado, y es natural tener esa postura, pero no hubiese estado mal ver al Último Hijo de Krypton con ese toque de esperanza que se vio al final del Hombre de Acero donde viamos a un Clark Kent dispuesto a ser aquel que nos guíe en el Sol para ser la mejor versión de nosotros.
Ben Affleck, quien en un principio fue duramente criticado por su papel en el mundo de los superhéroes previamente, es Bruce Wayne, mejor conocido como Batman, un Caballero de la Noche que durante 20 años en Gotham ha visto a buenas personas morir y dejarse llevar por la oscuridad, un Cruzado de la Capa cuyo cansancio hace que su primer encuentro con Superman sea chocante y aterrador, dando justificaciones a por que quiere detenerlo, sucediendo lo mismo con su adversario, ambos se ven como sus contrarios, como el día y la noche, sin poder ver que más allá comparten rasgos, cegados por el odio a lo que no pueden entender y tener bajo su control. Affleck nos regala a un Batman que aún con dos décadas de experiencia tiene mucho que aprender, con unas habilidades de detective innatas, con su característico carisma e inteligencia que tanto lo representan, un Caballero de la Noche luchador, que casi es sumergido por completo en la oscuridad que le arrebató todo.
Jesse Heisenberg es el encargado de interpretar a Lex Luthor, el multimillonario que no concibe que nuestro mundo idolatre a Superman, a un alienígena, y no a uno de su misma especie como el que se considero lo mejor de la raza humana. Darle una actitud extrovertida característica de los personajes que interpreta este actor, casi emulando a cierto antagonista payaso que ya habíamos visto no fue una buena idea, porque no permite apreciar el potencial que tiene este personaje como villano, y su plan que con un vistazo rápido no tiene sentido alguno, pero que refleja que la inteligencia que posee lo trastorna a tal punto de maquinar una conspiración que sea difícil de seguir incluso para los propios personajes, creo que si hubiesen optado por darle una personalidad más apegada a la de los cómics los cantares serían otros, un Lex Luthor egocéntrico y serio hubiese sido un deleite visual.
Quiero terminar de escribir sobre los personajes escribiendo referente a tres referente a tres secundarios cuyo papeles son muy importantes de acuerdo a su desempeño. Empecemos con Gal Gadot como Wonder Woman, que cerró bocas que la juzgaban por su físico y terminó dándonos una Princesa Amazona que no tiene igual, sirviendo para presentarla en este panteón de héroes, con aires de misterio y de apoyo para una de las amenazas físicas de la cinta, una figura femenina que impone respeto. Los últimos son Amy Adams una vez más como Lois Lane y Jeremy Irons como el interprete de esta nueva versión de Alfred Pennyworth, dos personajes que sirven para los protagonistas como los faros que los guían en la oscuridad y los pilares que los mantienen firmes en tiempos tan cambiantes, aun cuando el amor del Hombre de Acero tenga conveniencias en la trama, creo que a su estilo logran su cometido, servir de vinculo terrenal a estos personajes protagonicos titanicos.
Si hay algo que no se le puede negar que tenga este filme, es un cuidado minucioso en sus aspectos técnicos, me refiero a que la ambientación y escenografía nos transportan a un mundo de las viñetas trasladado a nuestros días de una forma exquisita, los efectos prácticos y especiales nos brindan escenas inolvidables, porque si hay algo que sabe hacer Snyder es dejarnos imágenes para no olvidar, y la banda sonora es sublime, tiene una personalidad casi divina, que será difícil de no olvidar en este viaje que se manifiesta indirectamente como una alegoría cinematográfica y religiosa en al arte, cuyo recurso había sido sutilmente introducido en El Hombre de Acero y aqui se termina de explotar.
El problema de Batman V Superman: El Amanecer de la Justicia es que intento ser muchas cosas a la vez, provocando que en un primer visionado las sensaciones que dejen sean confusas, pero que si dedica a visualizar más de una vez, se encontraran con un producto con ambición, y con esto me refiero a su Versión Extendida, que termina de cimentar esta odisea que tanto tiempo y dedicación en base al pensamiento recibió con el fin de regalar una estilo de relato que se había perdido en el tiempo, y que se intentó retomar aquí, con alegorías entre antiguas culturas e historias ficticias, que comparten algo, contar el comportamiento de la sociedad que en ese entonces poseían al ser concebidas.
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